¿Les ha pasado que les escriben como a las 3am?
¿Les ha pasado que les dicen que eres su "crush" desde hace mucho tiempo?
Y, sin darse cuenta están saliendo con "ese chico", y, desde ese día, todo es una sorpresa...
¿Les ha pasado que cuando se besan? Recuerdas cuando eras chiquita y el mundo desaparecía. Y, no puedes parar de besarlo, hasta que te das cuenta que: ¡Estás en la playa! ¡Que te pueden estar filmando! Y, ¡peor aun!, ¡haciéndote viral...!
¿Les ha pasado que él pide detener el tiempo? Que lo besarías, y, lo seguirías besando, hasta el día siguiente y el siguiente. ¡Ufff!
Si pudiese él pararía todos los relojes, bueno, me imagino, que a muchos de ustedes, les pasó, a mi me pasó con Nicola, un chico, por llamarlo de alguna manera peculiar, genuino, y que me agarró en un momento en que decidí enfrentar mis miedos, si esos miedos a dejar de lado el tener el control, la independencia, la vulnerabilidad, donde se juntan dos personalidades en concreto:
- Lia que será la que llamaremos: Ésa que se deja llevar, la que siente, la que fluye, la espontánea, la que te puede besar y olvidarse del mundo, caerte de sorpresa, desordenarte el día y, a la otra, la llamaremos:
- Vania esa que todavía tiene miedo, que no cree del todo lo que le dicen, que le enseñaron a taparse los oídos para no escuchar y dejarse engañar, y, abrir muy grandes los ojos para observar: "qué es lo que hace", ésa a la cual tienes que conquistar, "a la antigua", si es que se deja seguir viendo, ésa que piensa y analiza las cosas, ésa que te confunde, pero, al mismo tiempo, te atrae, su misterio ... ésa.
¿Con cuál nos quedaríamos? Creo que con ambas, las que hoy por hoy, forman a Mia... todo terreno, aventurera, deportiva, multifacética, familiar, soñadora, romántica, interesante y alegre...
Bueno, les contaré la historia de ellos dos, no en orden, tampoco, en desorden, en forma de recuerdos, que se formaron en mi memoria, y, también, en forma de añoranzas y sueños...
...
Una cocina -,
un poco de harina -,
una masa.
Un horno -,
harina en tu nariz-,
más que una masa.
Calor-,
harina en la mí nariz-,
tu soplido encima de la harina.
Harina en el piso-,
harina en mi cara -,
harina en tu nariz.
Harina en mis piernas -,
harina en tu espalda-,
Tu debajo-,
yo encima -,
harina en "mis mellis" (tetas)
- harina y, más harina...
Ventanas empañadas -,
el horno sonando-,
la masa quemándose -,
yo gimiendo-,
tu voz en mi oído-,
mi risa en el tuyo-,
tus besos -,
el horno sigue sonando-,
tus ojos me miran, y,
tu mirada me sonríe -
todo va al ritmo de cada gemido -,
de cada orgasmo-
donde pierdo la razón-,
donde ya nada importa -,
donde nos sobra harina,
pero, sobretodo,
risas...
El olor a quemado,
el piso helado,
la harina por toda la cocina -
mis pies pegados a los tuyos -
...
Mía: ¡Qué bonito es que lo hayas logrado!
Nicola: ¿Logrado qué?
Mía:
Detener los relojes -,
robarle minutos al tiempo-
Nicola: De la misma forma que tú lo logras.
Mia: ¿Que logró que?
Nicola:
Robarme el corazón,
logras que, sonría con la mirada, y,
que sienta qué te encontré...
Mía (Vania): y, ¿si nos equivocamos?
Nicola: Contigo me equivocaría mil veces para seguir descubriendo lo que es aprender contigo, y, reinventarme de nuevo...¡No lo entenderías!
Mía: ¿Por qué no?
Nicola: Porque no se puede entender lo que no sale de la lógica sino lo que sale de...
(Señala su corazón.)
De aquí...
y, aunque no lo creas lo tienes en tus manos...
Mía: Así como los pingüinos cuando les dan el huevito del pingüino bebe para que el papá lo cuide mientras la mamá va a buscar comida?
Nicola: Si, así cuídalo porque es tuyo.... y, de nadie más...
Mía: ¡Tremenda responsabilidad!, ...
pero, ¿cómo vas a vivir tú sin corazón?
Nicola: A través tuyo... ¡fácil!
Mía: Y,... si te doy el mío,...
pero, no vale jugar...
¡te lo doy ...!
Nicola: así sin más
Mía:
Alguna vez viste esa historia de una mujer que no podía ver y que le dijo a su novio q le diría q sÍ a casarse con él si algún día pudiese ver y él le dijo algún día podrás... después en esta historia aparece un donante de ojos que le permitiría devolverle la vista y ella se opera y logra ver, abrir los ojos y pregunta por su novio, le dicen que: no estuvo en la operación, ella se da cuenta q él nunca la quiso, y, cuando un día está con otro, caminando por la calle lo ve, y, le dice:
¿qué te paso? Nunca me quisiste? ¡Desapareciste!
Y, él le dice te amaba, tanto así que te pido cuides de mi vista y seas muy feliz...
Mía: ¿La viste? Tal cual te doy mi corazón ... ¿lo cuidas?
Nicola:
¿Quien diría q tu y yo?
Que todo empezaría con una conversación de Instagram,
a las 3am,
cuando, por fin hablamos y te invitó a salir... y,
ahora ...
no nos podemos despegar...
¿Quien diría?
¡Que me podría volver a enamorar!!
Mía: ¿Estás enamorado?
Nicola: Si, y eso que ya tengo tu corazón...
...
Mía: ¿Si pudieses pedir un deseo ahorita? ¿Cuál sería?
Nicola: Seguir sonriendo con la mirada, pero, ¿sabes por qué?
Mía: ¿Por qué?
Nicola: Porque me doy cuenta que te hago feliz
Mía (Vania): ¡Woww!,
¡no sigas! y,
¡saca esa masa que sino van a llamar los vecinos a los bomberos...!
Nicola:
No te preocupes quemaría mil masas más por minutos robados al tiempo, pero, de tu mano.
De la mía así recorrería todooo el universo,
te bajaría las estrellas,
te haría tocar la luna,
solo para que me digas que se siente que te den todo,
sin pedir nada a cambio,
¿qué se siente que sonrían a través tuyo?
Mía (Lia):
¿Sabes? ...
lo pensé mejor,
embárrame de harina...
Y así...
sin más...
me comí todo el azúcar que te cayó encima , y,
me empalague el alma,
por lamer cada centímetro de chocolate que,
tropezó en tu piel,
y, cada merengue ,..
me tumbé al piso, y,
de rodillas,
sólo con un mandilito rojo,
probé cada gota de ti...
No lo puedo olvidar,
mi piel de gallina,
mientras me besabas,
mientras me tocabas,
como temblaba, y,
como me mirabas,
debería estar prohibida tu mirada, y,
sobretodo,
que salgas a la calle,
es un delito...,
si te raptan...,
¿qué haría?
Camina despacito,
con luces neón,
con GPS por si te raptan,
contratar mil perros rottweilers,
para que te rescaten, y,
llegues bailando,
a este espacio,
que he dejado.
Nicola: ¿Al lado de tu cama?
Mía:
No,
Encima mío ...
ese espacio que dejé,
para sentirme de a uno...
...
No sé si alguna vez les pasó...
que se sienten tan tontas,
no pueden quitárselo de la cabeza,
que les gustaría que no estuviese tan lejos, y,
que esté cerquita,
pero, no sólo cerquita,
sino que no exista espacio entre su boca y la tuya,
que el aire no circule entre ambos,
que ese espacio sea cubierto con un beso,
con el sabor de todo lo no dicho,
con esa invasión,
que tiene esa mezcla de adicción,
de vicio,
de deseo,
de posesión,
de haberse echado de menos...
...
Esos besos que te dejan sin palabras,
donde no hay nada que argumentar,
donde no hay inseguridad que valga,
donde con un abrazo
sabes que todo está bien,
que ahí es donde todo está bien....
precisamente en ese lugar,
donde no entiendes,
como has vivido tanto tiempo
Separados,
Tan lejos,
donde la mirada se pierde,
donde mis ojos se nublan,
tu cuerpo se desespera,
mi piel te añora,
donde el recuerdo de tu olor,
De tu risa, tan cómplice, tan tuya,
te roba algo más que una sonrisa,
donde cierras los ojos,
Súper fuerte,
para volverlo a ver en tu memoria,
donde definitivamente lo echaste de menos,
donde al miedo,
tratas de expulsarlo por la misma ventana por la que entro
para que no boicotee lo más bonito que tienes,
y, entonces, sin más,
sin poderte contener,
le escribes, pero,
desde tu imaginación,
¿por qué?,
el miedo al rechazo, o,
a que desaparezca de la nada es más grande,
pero, en esa imaginación,
le vuelves a repetir:
"Debería estar prohibido que salgas a la calle,
con esos ojazos,
con todo tú,
esa forma que tienes,
ese estilo,
te pueden raptar,
es más,
si fuese ladrón,
te raptaba,
Y, no aceptaba recompensa,
y, si fuese policía te meto en la cárcel,
deberías estar prohibido,
incitas al crimen..."
...
Todo esto me hizo recordar,
a esa vez en que,
me llevaste a tu espacio,
me comiste la boca,
me cogiste del pelo,
no me dejaste hablar,
solo me miraste,
y, ya sabía que no podría resistirme,
oponerme era un pecado,
negarme no era una opción,
me pusiste de espaldas,
contra la pared de tu cuarto,
me alzaste los brazos
me colocaste esposas,
me oliste,
detrás de las orejas,
me volviste a voltear,
me cogiste de la cintura,
me arrancaste la ropa,
con la boca,
me alzaste las piernas,
a la altura de tu cintura,
me cargaste,
a tu altura,
y, me hiciste tuya...
...
Mis ojos,
brillaban,
mi cuerpo,
temblaba,
mi piel,
no se podía resistir,
cada vez que la tocabas,
se perdía entre tus dedos,
mis labios,
se mojaban,
se hinchaban,
me hacía chiquitita,
y con cada movimiento,
me hacía más,
pequeñita...
...
Me convertía,
en tu adoración,
con cada beso,
me convertía más,
en tu musa,
y, con cada aliento,
me iba transformando,
en tu princesa,
con cada suspiro,
mutaba,
en tu reina y,
con cada gemido,
en tu diosa,
en tu afrodita,
en tu inspiración,
eso que querías cuidar,
en ese angelito,
que tiene de ángel y demonio,
en ese complemento,
en ese equipo,
era como si...
encajáramos a la perfección,
tan perfecto que asustaba.
...
No volábamos,
flotábamos,
en la galaxia,
de cada atardecer,
en que una estrella fugaz se lograba posar sobre tu espalda,
en que cada mariposa se lograba posar sobre mis pies,
donde entrelazados de ilusiones,
de aviones de papel,
de origamis,
de discos de vinil,
de viajes por hacer,
de sueños por cumplir,
en que cada ardilla perseguía a la mariposa que se posaba sobre nuestros pies,
esos que estaban entrelazados debajo de las sábanas,
donde la mariposa y la ardilla se divertían,
haciéndonos cosquillas,
haciéndonos reir,
embarrándonos de chocolate,
quemándonos con hielo,
ardiendo como el fuego,
cera,
velas,
sabores,
sensaciones,
sentidos,
sin aire,
donde con un poco de merengue,
una pizca de miel,
un poco de helado,
un poco de imaginación
sí,
lo lograste,
construíste,
nuestro castillo,
sobre bases inquebrantables...
...
¿Qué tenía?,
Nos tenía a nosotros,
tal cual,
y, a todo aquello que formaba parte de nuestras vidas,
donde sin escudo,
donde sin corazón,
donde sin pensar,
cogí tus manos,
envolví mi cuerpo con el tuyo,
donde no lograba diferenciar mi respiración de la tuya,
mis pensamientos de los tuyos,
mis emociones de las tuyas,
mi piel de la tuya,
donde volvíamos a ser uno,
a pensar de a dos,
y que bonito se sentía...,
saber que hacías más bonito mi mundo,
que mi corazón estaba protegido,
con armaduras,
de ese superhéroe que enloquecía mi universo,
y con espadas protegía mi vida,
como si fuese el tesoro más buscado,
con capas, antifaces, botas y, poderes,
me salvaba,
me mostraba su mundo...
pero, conmigo, en él...
que bonito se sentía...
...
Mis ojos vendados,
sin poderme mover,
congelada,
en pause,
como si el tiempo se hubiese detenido,
y, me hubiese quedado sin aire,
sólo,
me dejaba llevar, y,
de tu mano iba descubriendo tu mundo,
mis piernas se quebraron,
caí al piso,
me deshidraté,
perdí el conocimiento,
me perdí entre las estrellas fugaces,
entre las mariposas,
entre las ardillas,
me perdí...
...
No podría describir cada orgasmo,
cada súplica de mi cuerpo,
por tu piedad,
porque me regresarás,
me trajeras de vuelta...
Cada quemadura que produciste en mi,
cada lágrima que embriagó tu deseo,
cada gemido que escuchó tu mente,
me quebré y,
debo confesar que me sigo quebrando tan solo imaginándomelo todo de nuevo,
mi mente,
mi cuerpo
toda yo,
con cada recuerdo,
vuelvo a sentir como si,
de nuevo,
estuvieses viviendo dentro de mi...
debo confesar,
todavía te siento...
que bonito se siente tenerte en mi vida...
...
TÚ-,
YO-,
Solo TÚ y YO,
somos DOS,
somos UNO,
simplemente,
SOMOS,
pensamos de a dos,
no puedo dejar de repetirte:
"que bonito tenerte en mi vida..."
Congela los relojes
y, déjame ahí,
donde nada pueda moverme,
déjame ahí,
pegadita a tu corazón...
Pegadita a tus latidos,
cerquita a tus pulsaciones,
ahí,
dentro de tu corazón,
donde late tan fuerte,
donde puedo controlar tus latidos,
donde se aceleran de emoción,
pero, al ritmo exacto,
al ritmo de nuestros relojes,
al ritmo perfecto,
a nuestro ritmo,
tan mío,
tan tuyo,
tan nuestro...
...
Y, donde no puedes evitar sonreír,
cada vez que sales de la ducha,
y, piensas en mi,
disfrazada de delincuente,
raptándote, o,
queriendo volver rápido para verme de nuevo
y, ser tú el que me secuestra...
...
¿Será eso que llaman amor lo que nos está pasando?,
¿quién lo diría?,
¿que esto podría pasarnos?,
yo que creía que ya no tenía corazón, o,
que se había vuelto de piedra, o,
¿Será que nos hicieron brujería?, o,
¿me corrompiste el alma sólo para hacerme adicta a ti?,
a tus besos,
a tu esencia,
sea lo que sea,
síguelo haciendo,
eres mi vicio,
pero, ese vicio bonito,
ese que hace que sonrías con la mirada,
porque, podría ir diciendote:
"TE..."
...
Sonso...,
Re-sonso,
eres un tonto,
tan lindo,
¡me encantas!
no lo diré,
no te pienso asustar,
ni que te congeles como yo...
pero...,
creo que es mutuo,
creo que los dos:
"NOS..."
...
¿Qué pasa no te atreves a decirlo?,
es cierto...,
tú lo dijiste antes...,
tú lo dijiste primero.
¿Eso quiere decir que me toca decirlo a mi?,
o, ¿puedes repetirlo una vez más?,
así mi corazón lo escucha cerquita, y,
lo guarda ahí...
Mira que yo soy mujer,
¿si?
Di que sí...
sólo una vez más,
para terminar el día sonriendo...
Empezabas diciendo:
"TE..."
me haces sonreír...
haces más bonito mi mundo,
que lo sepas...
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