Levantaste un muro,
Entre tú y yo,
Levantaste una barrera,
Una distancia,
Cerraste las posibilidades,
De cualquier oportunidad juntos.
EL: ¿Cómo es?
ELLA:
¿Qué?, ¿Mi vida sin ti...?
Mmm,
me la estaba imaginando
a centímetros de tu boca,
y, de pronto,
me di cuenta que,
te perdí
te perdí
que, me perdiste...
Me cansé de esperarte,
De buscarte a ciegas,
De callar a mi boca,
Para que tu silencio
no me asuste...
no me asuste...
No entenderías,
no lo sabrías,
escondí mi corazón,
enterré mis emociones,
cerré las puertas...
no ahora,
hace mucho...
hace mucho...
Detrás de unas barreras,
Detrás del escudo,
que construí para protegerme,
detrás de todo
venías tú
con esa fuerza
con ese ejército
tumbándolo todo a tu paso,
a tu ritmo...
detrás de todo
venías tú
con esa fuerza
con ese ejército
tumbándolo todo a tu paso,
a tu ritmo...
Me da miedo
mucho miedo
me das miedo...
Hace mucho que,
no me sentía así.
no me sentía así.
Hace mucho que,
Que no tenía tantas ganas,
que me muerdan,
mejor dicho,
que me muerdas,
ufff---
Que no tenía tantas ganas,
que me muerdan,
mejor dicho,
que me muerdas,
ufff---
No podía evitarlo,
vibraba al ritmo de tu voz,
no podía evitar que mi cuerpo vibrara,
con tu respiración,
No podía evitar que mi cuerpo vibrara,
con tu piel...
vibraba al ritmo de tu voz,
no podía evitar que mi cuerpo vibrara,
con tu respiración,
No podía evitar que mi cuerpo vibrara,
con tu piel...
no podía evitar que me hicieras tuya,
definitivamente,
no podía evitarlo,
definitivamente,
no podía evitarlo,
no podía evitar que me hicieras tuya...,
tuya-tuya-tuya,
al ritmo de la música,
del jazz que pusiste en la consola...
tuya-tuya-tuya,
al ritmo de la música,
del jazz que pusiste en la consola...
Y, pensar,
que me hiciste sentir,
que te dejé de importar...
¿Con qué intención?
¿Por qué?
Jamás lo entenderé...
Y pensar,
¿Con qué intención?
¿Por qué?
Jamás lo entenderé...
Y pensar,
Que me endulzaste,
solo para reírte luego...,
y, burlarte con más fuerza...
de lo que quedaba de mi,
de lo que quedaban de mis miedos,
de lo que quedaba de mis escudos...
Y pensar,
que tal vez fue una apuesta,
que le hiciste al destino,
para burlarte junto a otros,
de cada sirena que te topaste en el camino...
de lo que quedaba de mi,
de lo que quedaban de mis miedos,
de lo que quedaba de mis escudos...
Y pensar,
que tal vez fue una apuesta,
que le hiciste al destino,
para burlarte junto a otros,
de cada sirena que te topaste en el camino...
¿Y, qué si pudiese elegir
despertar de alguna manera?,
Sería a tu lado,
sería contigo...
¡Siii!,
¡En cucharita!
¡En cucharita!
¿Cómo me imagino en mis sueños?,
Amaneciendo contigo,
Comiéndonos la boca,
Sonriéndole al tiempo,
Que pasa tan rápido.
Llenándome de energía,
solo para que te des cuenta,
lo bonito que haces mi vida,
desde el día que apareciste.
Me haces grande,
Me siento pequeñita,
Me haces gigante,
me siento fuerte,
Y, al mismo tiempo
Tan frágil,
Tan débil.
Y, quiero que me cargues,
Solo para perderme en tu olor,
Y me des vueltas,
Y vueltas,
Al ritmo del sol…
La luna gira, y,
da vueltas,
alrededor de las estrellas…
mis cómplices...
Y, el brillo de mis ojos regresa,
cada vez que me acuerdo
como me mirabas...
No puedo evitar sonreír y,
quererme pegar a ti…
Así no quieras darte cuenta,
Así te hayas escondido,
aunque sea sólo para molestar,
Así pienses que me olvidaste,
Me froto los ojos,
Y, me los vuelvo a frotar,
Solo para darme cuenta que...
me quede sin poder respirar
El día que me di cuenta que...
no me pasabas a buscar
Así que giré y giré,
Le susurré al espacio,
a la galaxia entera,
Que se acercara a tu oído,
Y, te susurrara que:
ELLA:
¡Me gustas…!
Y, con la cara rojita…,
Debajo de la almohada,
Con mucha timidez,
De solo pensar que,
me llegaste a escuchar,
cuando te dije,
cuando te dije,
Cuanto me llegas a gustar.
Y, de pronto,
Suena el teléfono:
Ringggggg
ELLA: ¡Eres tú…!
No quiero contestar,
No para de sonar,
De vibrar,
Y, sin querer contesto,
Y, se escucha del otro lado:
EL: ¡Amor…!
Y, sin que pueda responder
Suena el timbre,
Abro, y,
¡Eres tú…!
Y, me pego a ti,
Como un imán,
No me puedo despegar.
Me besas,
Te beso,
Me quiebro,
Bajo el escudo,
Bajo la guardia,
Y, de pronto,
me dices:
me dices:
EL: ¡Me encantas!
Y, mis labios no responden,
Me besas
Y, lo único que te puedo decir
Con eso que me queda de niña
De pequeñita es:
ELLA: ¡NO ME CAES…!
Comentarios
Publicar un comentario