tararaaaa la la la la laaaa

De pronto te vi, en medio de ese patio gigante, pasando cerca de la pileta de la Calle 84, con ese vestido que arrastrabas por el piso, de blanco, toda de blanco, con el pelo rizado al viento, los hombros destapados y esas pequitas salpicadas como estrellas en el espacio, casi te tropiezas de lo largo que era el vestido, andabas sin zapatos, totalmente descalza, y de pronto empezaste a tararear ...

Ella: La la la la laaaa

El: ¿Así iba esa tonadita?

No pude evitar acercarme y susurrarte al oído mientras cogía tu cintura mientras me temblaban las manos..

El: ¿bailamos?

Ella: La la la la laaaa 

Y lo empezaste a hacer... girar y girar y empezaste a desaparecer entre la niebla, haciéndome pensar que solo estabas en mi imaginación ....

Ella: La la la la laaaa

Te seguí y te hice el mejor intento de movimiento de lo que se pueden llamar pies y no pudiste evitar sonreír. No se si sonreías o te burlabas de mi torpeza, pero no me importaba, esa risa lo valía todo, incluso el que me ponga super rojo, y, de pronto empezaste a moverte...

...tu cuerpo bailaba al ritmo de la brisa, tus movimientos eran míos... tu risa era tan mía pero a la vez tan tuya que me reía de mi mismo, sentía q podía bajarte la luna, acariciar las estrellas y comprarte todos los planetas... ¿te imaginas? tendrías tu propia estrella en el cielo, mejor aún, tu propio planeta... seguro quisieras que te regalara marte, ¿o sería venus?, ya te imagino haciendo historias con las estrellas como solías hacerlo cuando nos acostábamos a contemplarlas...

El: Tararaaaa ....

Un rayo en el cielo, una huella en el piso, eran las marcas de las huellas de tus pies de tanto bailar que habían quedado marcadas en el piso... que no podían borrarse... eran las huellas del misterio de tu pisada... de esa mirada que parece tan ausente, tan tuya, tan perdida, que algo oculta pero no logro descubrir que es...

Mientras ingresabas en esa camilla a la clínica y los doctores ni me alcanzaban a ver, creo que por el temor a decirme lo que estaba pasando... al parecer, te estaban perdiendo...

...es como una tristeza infinita que te va comiendo por dentro al punto de tumbarte al piso, extender tu mano queriendo alcanzarme... 

Pero rápidamente entraste a cuidados intensivos y no pude alcanzar tu mano, ni siquiera topar tus pies cansados de tanto bailar, ni escuchar tu risa, sólo había silencio, sólo había ese olor a clínica, tan desagradable, ese olor que no quieres recordar...

Que locura todo esto...!!! Tan perfecta pero tan ausente, esa conjunción perfecta que desordena todos y cada uno de mis días... esas huellas... volví mil veces buscándote pero solo pude ver esas huellas.... les llaman huellas en el corazón de mis recuerdos... huellas en lo que me queda de corazón, si es que algo quedo cuando partiste porque creo que te lo llevaste contigo, ya no late... 

EL: la la la la laaaa tararaaaaa

sólo estás ahí sin moverte, sin hablar, sin mirarme, sin sonreír... solo estás ahí o por lo menos creo que lo estas...

Y solo recordarte hace que piense que todavía late, que todavía tengo corazón, que todavía algo quedó aunque sea las huellas en mi corazón, pero... cuando cierro mis ojos, logro recordarlo como si hubiese sido ayer:

Fue esa noche en vela cuando en esa clínica estabas y sin dudarlo, sin decírtelo, sin contárselo a nadie, sin emitir ruido, cerré los ojos y te dejé vivir a través mío, te di lo más grande y fuerte q tenia —- MI CORAZÓN...

EL: ¿Lo escuchas?

EL: Tararaaaaa

Parecías un ángel... y mientras más te movías tu vestido se tornó con manchas rojas, y empezó a brillar a la luz de la luna que iluminaba tu cara como si fueses lo más bonito q pudo haberse topado en este mundo - no pude evitarlo y sin querer- mis pies cogieron tu ritmo, se toparon con tu cintura y bailamos , como nunca antes había bailado...

Eras esa mezcla de imperfección que hace una conjunción perfecta y no puedes evitar dejar de mirar... de contemplar, y empezaste a girar y girar, alcancé a besarte, esos besos que te dejan sin aliento, que te cautivan y esperan la llegada de otro beso más, y, una lágrima rozó mi mejilla, una lágrima tuya y...una lágrima mía...

... desapareciste como desaparecen las mejores historias, sin mayor explicación, te esfumaste y cuando corrí para alcanzarte y mire para abajo: quedaba tu vestido, sólo tu vestido blanco en el suelo, tu olor... solo tu olor...me froté los ojos para ver si era un error, los volví a frotar, me pellizque a ver si estaba teniendo una pesadilla...

El: Lo recogí, sí tu vestido, lo olí con la esperanza que te trajera de vuelta!!

Y se escuchó:

ELLA: Tararaaaaa la la la la Lalaaaa

y alcancé a seguirte---- tararaaaa la la la laaaa

y repetiste: la la la la lalaaaa

FIN
AUTOR: YO